Una especie que crece a orillas de la playa, llamada comúnmente Lágrimas de cristo produce estas maravillosas semillas que perduran en el tiempo y tienen una cubierta casi de nácar. Esta lleva conmigo unos 20 años y está intacta, así que decidí recubrirla con la magia del crochet para hacer con ella un colgante o dije y de esta forma darle uso.
Puedes forrar cualquier semilla, la base para empezar, siempre será un anillo de cadenetas y luego puntos bajos. No debes aumentar para que tome forma de gorro o cucurucho. Las vueltas siguientes se tejen según el tamaño y forma de la semilla, en un estilo punto red que consta de puntos altos y cadenetas.
Los materiales que vas a necesitar son:
Una semilla
Hilo (en este caso usé sedalina Anchor)
Ganchillo 1.5 mm Tijera y aguja para rematar
Paso 1. Tejer 4 cadenetas y cerrar en anillo
Paso2. Tejer 8 puntos bajos o medio punto
Paso 3. Tejer dos puntos altos separados por tres cadenetas
Paso 4. Sigue tejiendo en estilo punto red, según seda el tamaño y forma de la semilla
Paso 5. Al llegar arriba cierra con una vuelta de medio punto o puntos bajos
Paso 6. Teje seis cadenetas y fórralas de puntos bajos a manera de argolla
Remata con la aguja escondiendo la punta del hilo y corta el sobrante
Keep calm and Love!